Memorias recuperadas (2): El exilio de Josefa Solé (Viuda de Arsenio Jimeno)

Recuperamos la memoria del exilio en Francia de Josefa Solé Panella. Socialista, viuda  del militante histórico del PSOE y de la UGT en Aragón Arsenio Jimeno, fue entrevistada por David Corellano Aznar en el año 2001.

1.- El exilio a Francia e internamiento en el campo de concentración de Prats de Molló

Josefa cruzó a comienzos del año 1939 la frontera francesa camino del exilio, llegando a Prats de Molló, municipio al que afluían todos los refugiados españoles que pasaban la frontera por el Coll d'Ares. Allí ingresará en el campo de concentración levantado por las autoridades francesas.

Campo de concentración de Prats de Molló. Foto Roger Violet. L’Ilustration

A su llegada la instalaron en un hangar donde había paja y mantas. Dentro estaban las mujeres y los niños, y fuera los hombres y los mayores de 14 años (escuchar).

Las condiciones de vida eran muy duras. Hacinadas, durmiendo sobre tablas, con ratas. Los gritos eran continuos. Su situación era bastante más delicada pues iba acompañada de su hijo lactante al que difícilmente podía alimentar (escuchar).

Allí morirá su hijo. Josefa aprovechó el duro trance de su entierro para despistar a los guardias y ayudar a que 2 compañeras refugiadas pudieran huir del campo de concentración (escuchar).

2.- Exilio en Toulouse

Josefa también logrará escapar, trasladándose a Toulouse, con la única referencia de que allí había muchos españoles. No en vano la ciudad llegó a acoger a cerca de 100.000 exiliados. Además fue la sede del PSOE y la UGT en el exilio.

Placa en recuerdo de la sede del PSOE y UGT en Touluse.

A la “ciudad rosa” llegó sin dinero y sin conocer a nadie. Allí trabajará primero en un restaurante, y después fregando en un café (escuchar). Sin carta de trabajo ni permiso de residencia Josefa vivía con el peligro de ser detenida por la policía (escuchar).

3.- Las duras condiciones  de vida en Touluse durante la ocupación alemana

La ocupación alemana supondrá un recrudecimiento de las condiciones de vida. El hambre hizo que Josefa y su marido Arsenio tuvieran que ir a los “comedores de los mendigos” lo que entrañaba riesgo de ser detenido por los soldados alemanes (escuchar),

Josefa, como el resto de refugiados, sufrirá el control al que los alemanes sometían a la población (escuchar).